Boquillas de tratamiento de los olores – Cobertura de la pulverización.

A menudo las superficies tratadas son muy importantes, lo que requiere tubos con una pulverización tan importante. Tal como se explica en los parámetros técnicos, la pulverización ideal para tratar los olores consiste en una atomización muy de finas gotitas.

Desgraciadamente se utiliza una gran parte de la energía del fluido para la formación de estas finas gotitas y no sigue siendo más que la poca energía para la propia pulverización.

Boquillas aerosoles de aire

Las boquillas aerosoles de aire pueden solucionar este problema. Como la energía utilizada para romper el fluido procede de otra fuente (aire comprimido) toda la energía inicial del fluido sigue siendo disponible para la pulverización. Por lo tanto, estas vaporizaciones muy finas pueden pulverizarse a 7 ó 8 metros a pesar de un bajo caudal. Eso quiere decir que menos tubos y en consecuencia menos tuberías son necesarios para cubrir una gran superficie.